El agua del garrafón sabe a petróleo
(¿No les pasa eso en su casa?)
y la de la llave ya sabemos
que contiene cloro, a veces demás.
Cómo se los explico en verso….
A vil petróleo me sabe
el agua del garrafón;
de cloro tiene el sazón
toda el agua de la llave.
Ambas aguas ya mezcladas
a petrocloro me saben,
y petroclorines salen
en las aguas evacuadas.
Ya con caldo de frijoles
no sé qué ande resultando:
pueque salgan aerosoles
de petroclorinetano.
Muchos de grandes inventos
surgen por casualidad,
pueden ser estos momentos
de un cambio en la humanidad.
Porque la mezcla aludida
tiene oxígeno e hidrógeno,
no nada más es bebida
si se le aplica un gasógeno.
Puede ser la mezcolanza
combustible cotidiano
-octosílabo no alcanza-
Hidropetroclorinóxidometano!!
Jesús Alfonso Montaño Durazo
Octubre 2011